LA CRISIS

Hola de nuevo al espacio billarístico, de vuelta de unas amplias vacaciones. En las que me ha dado tiempo casi para todo, incluso pensar un poco. En estos momentos, dicen, de crisis (curiosamente leí hace poco un artículo que informaba que producimos comida para unos doce mil millones, o sea, casi ración doble para todos los que somos de este planeta. Y sin embargo tenemos millones muriéndose de hambre. ESTO NO ES UNA CRISIS, ES MALA IDEA), decía que en estos momentos de crisis me encuentro con la vuelta a una liga nacional española cuya segunda fase se realizará sin tener en cuenta la proximidad geográfica. Vaya por Dios, 15 años para recuperar este sistema y se realizará en el peor de los momentos. Porque muchos Clubes se están pensando si participarán o no dado el aumento considerable de gastos económicos que tal decisión supone. Este formato se retoma por criterios deportivos y desde luego NO por criterios económicos. Curiosamente va acompañada de otra decisión como es el formato de las pruebas de ránking cuyo criterio básico es el económico y, de ninguna manera, el deportivo.

¿A QUÉ JUEGAN NUESTROS MANDATARIOS?

Yo reivindico desde hace una década la liga-liga, o sea, todos contra todos y a nivel nacional, ¡claro que sí! es la liga verdaderamente seria, todos contra todos, como debe ser. Y así estuvo durante muchos años. Pero claro, entonces se financiaba (hoy esto se lo han saltado a la torera). Posiblemente nos respondan no es posible financiarla por escasez presupuestaria acompañada de crisis. Qué fácil es manejar la palabra crisis para lo que interesa. Y qué difícil que expliquen bien en qué se van 500 o 600 mil euros.

Cada vez tengo más claro que la culpa es nuestra, no recibimos casi nada y aportamos todo, que si nos plantamos y decimos todos BASTA, NO PARTICIPO, otro gallo cantaría. Porque en el billar, al menos en el español, no hay crisis sino generadores de crisis y porque como dice mi amigo José Ramón, por desgracia deberían estar en los cargos directivos personas solventes económicamente que no necesiten el billar para vivir de ello sino para disfrutar de ello y hacer disfrutar a los demás. Porque las federaciones deberían ser llevadas por los BILLARISTAS sin afanes políticos y mediadores.

El año que viene hay elecciones: ¿dejaremos pasar de nuevo una gran oportunidad y permitiremos una vez más cuatro años que los generadores de crisis sigan? ¿lograremos ser más críticos construcitvos que crisísticos.

O VOLVEREMOS A COGER DE NUEVO EL PALO E IR CON ÉL A DONDE NOS MANDEN PORQUE DE ESAS COSAS NO ENTENDEMOS.